Durante algunos años California Western School of Law de San Diego, California, EE.UU., así como la Barra Americana de Abogados (ABA ROLI) realizaban competencias de litigación oral entre las Universidades públicas y privadas de México; por otro lado, la Universidad Nacional Autónoma de México organiza un concurso de este tipo llamado “CULPA”, el Instituto de Formación y Actualización Judicial del Poder Judicial del Estado de Chihuahua[1] implementó “DOLO” Desafío de Litigación Oral, y el Tecnológico de Monterrey campus Puebla[2] “CRIMEN”; por mencionar algunos concursos de esta índole.
Mientras la Universidad de Guanajuato tiene una escuela de litigación oral denominada Equipo de Litigación Oral de la Universidad de Guanajuato ELOUG, un espacio destinado exclusivamente a preparar equipos de litigación y que, hasta el año 2021, ha formado a la 10ª y 11ª generación[3].
Resultado de nuestra experiencia dentro de dichas competencias, en el estado de Querétaro comenzamos este desafío en noviembre de 2022, organizando el Primer Concurso Estatal de Juicio Oral “IUS QRO”, ya que las competencias de este tipo son poco conocidas en nuestro estado por las autoridades universitarias y por los estudiantes de Derecho.
Estos concursos se desarrollan simulando audiencias, ya sea Audiencia Inicial, Intermedia o de Juicio Oral, e inclusive hay concursos de mediación; los estudiantes forman equipos de tres o cuatro integrantes, quienes son asesorados por un profesionista con experiencia en el Sistema Penal Acusatorio y Oral. A grandes rasgos, la competencia se desarrolla en rondas de audiencias donde cada equipo compite con un equipo contrario, quienes son calificados por personas con amplia experiencia en dicho sistema y, de acuerdo a una rúbrica de evaluación, se obtiene cierta puntuación, lo que permite la eliminación de cierto número de equipos y, al final, sólo dos de ellos disputan el campeonato.
Pero la interrogante que surge es: ¿estos concursos universitarios de técnicas de litigación oral son eficaces para la vida profesional de un estudiante de Derecho? Desde mi perspectiva como docente y asesora académica de equipos de litigación oral, la respuesta es: claro que son eficaces para la vida profesional de un estudiante de Derecho. Cuando realmente existe compromiso, dedicación, estudio, constancia, trabajo duro y sacrificios por parte de los asesores y asesoras académicas, pero -sobre todo- de los estudiantes que integran los equipos de litigación, porque implica destinar horas extracurriculares para alcanzar el objetivo final.
Muchas veces he escuchado, otras tantas he visto y leído en redes sociales, opiniones disidentes que no concuerdan con este tipo de actividades académicas, cuyo fundamento es que un juicio no se gana con puntos; cierto es, que se trata de un concurso y, por lo tanto, existen reglas para definir un ganador. Pero, más allá de las reglas para obtener el campeonato de un concurso de técnicas de litigación oral, lo que adquieren los estudiantes son valores, habilidades y herramientas para su vida profesional.
Mencionaré algunos valores:
- Ética: la cual permite a los estudiantes de Derecho conducirse bajo el respeto de las reglas de la competencia.
- Compañerismo: ser solidarios con todas y cada una de las personas que participan en la competencia y no exclusivamente con su equipo.
- Trabajo en equipo: cooperar entre los integrantes de su equipo para resaltar las habilidades personales de cada de ellos.
- Competitividad: entre los equipos, para alcanzar el objetivo final.
Habilidades:
- Escucha activa: los estudiantes tienen que estar atentos y concentrados de la intervención de su contraparte.
- Pensamiento rápido: la competitividad hace que los estudiantes desarrollen pensamiento rápido y, como consecuencia, solucionen los problemas de manera eficiente.
- Trabajo bajo presión: el tiempo de intervención permite al estudiante sintetizar la información relevante.
Y las herramientas para la vida profesional son aportadas por los jueces evaluadores a cada uno de los estudiantes durante la retroalimentación al final de cada participación, quienes resaltan áreas de oportunidad de cada uno de ellos para mejorar; y esto, la mayoría de las veces, no se adquiere en las aulas porque los planes de estudio no están diseñados para generar conocimiento a través de la técnica pedagógica aprender-haciendo.
Por ello, concluyo que los concursos sobre técnicas de litigación oral son una excelente área de aprendizaje para los estudiantes de Derecho para conectar la teoría con la práctica (no necesariamente deben versar en el Sistema Penal Acusatorio y Oral). Es un comienzo para la vida profesional cuando egresen de las aulas, porque sabrán qué hacer en una audiencia si algún día se presentan como fiscales, asesores jurídicos o defensores, inclusive como jueces; sin embargo, no quiero decir que sean suficientes para ejercer, ya que se necesita mucho más que el título de campeón de un concurso de litigación oral –pues, reitero, sólo es un comienzo- ya que en esta profesión hay un camino muy extenso que recorrer y nunca dejamos de estudiar.
Finalmente, a los directivos de las instituciones públicas como privadas los exhorto para que implementen estas competencias entre la comunidad universitaria porque es un parteaguas en la vida de los estudiantes, ya que los tiempos van cambiando y los métodos de enseñanza deben adecuarse a las nuevas generaciones, máxime que el objetivo principal de las universidades es dotar de profesionistas, específicamente en el área del Derecho, con valores, habilidades y herramientas para resolver conflictos sociales.
Citas.
[1] INFORAJ (2023). Recuperado de: LANZA PODER JUDICIAL DEL ESTADO DE CHIHUAHUA CONVOCATORIA NACIONAL DE DESAFÍO DE LITIGACIÓN ORAL
[2] AMERICABARASSOCIATION. (2023). Recuperado de: CRIMEN. II SEGUNDO CONCURSO REGIONAL INTERUNIVERSITARIO DE MEDIACIÓN Y LITIGACIÓN ORAL.
[3] Universidad de Guanajuato. (2021). Recuperado de: Equipo de Litigación Oral UG – 10ª y 11ª Generación
Mtra. Leonila Ugalde Pérez
Licenciada en Derecho por la Universidad Autónoma de Querétaro, con dos especialidades, la primera en Derecho Penal y la segunda en Proceso Penal Acusatorio por dicha Universidad, Maestra en Derecho con Especialización en Litigación Oral por California Western School of Law de San Diego, California, EE.UU.
Asesora en el Tercer Concurso Nacional de Juicio Oral y Audiencias Preliminares organizado por California Western School of Law, así como en la VII Competencia Nacional de Litigación Oral organizada por American Bar Association, en la cual logró posicionarse con el EQUIPO IUS QRO dentro de los primeros ocho lugares.
Ha impartido el curso virtual “Derecho penal” en la XXV Semana del Estudiante Mesoamericano de la Universidad Mesoamericana campus San Juan del Río, Querétaro, así como el taller “Audiencia Inicial para Docentes” en la Academia de Juicios Orales de la Facultad de Derecho de la Universidad Anáhuac campus Querétaro, entre otras actividades.
En conjunto con el EQUIPO IUS QRO impartieron el primer curso básico intensivo de Técnicas de Litigación Oral a los estudiantes de la Universidad Autónoma de Querétaro. Y es integrante del Comité Organizador del Primer Concurso Estatal de Juicio Oral “IUS QRO” en el Estado de Querétaro.
Facebook:
Concurso Estatal de Juicio Oral “Ius Qro”