El fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, no se ha presentado en lo que va del año en las oficinas de dicha institución debido a problemas de salud que lo mantienen alejado del trabajo desde finales del año pasado. Esto sin que públicamente la institución haya informado algo al respecto.
Autoridades federales confirmaron a Notitia Criminis que salvo algunas instrucciones específicas Gertz tampoco se encuentra laborando a distancia. Por ello y de acuerdo con la Ley Orgánica de la institución, la institución está a cargo – por ahora – del fiscal Especializado en Control Competencial, Juan Ramos.
De acuerdo con las fuentes consultadas, la FGR se mantiene laborando con normalidad pese a la ausencia del fiscal General. Ramos es, de hecho, el abogado personal de Gertz y su funcionario de mayor confianza.
Aunque en los cuatro años que lleva al frente de la FGR Gertz Manero no es un funcionario que aparezca con frecuencia en actos públicos, fue notoria su ausencia en la cumbre bilateral y trilateral que los presidentes de México y Estados Unidos y el primer ministro de Canadá sostuvieron con sus respectos gabinetes hace unos días en Palacio Nacional.
Al ser cuestionado sobre este hecho el canciller Marcelo Ebrard solo atinó a explicar que el fiscal “tenía otros compromisos” establecidos previamente, y que no se le había avisado a tiempo.
El periodista Darío Celis publicó en su columna en El Financiero que lo que presuntamente padece el fiscal es de un cáncer en el páncreas, y que fue trasladado a un hospital en Baltimore, Estados Unidos, para ser intervenido quirúrgicamente en la última semana de diciembre.
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