Por: Arturo Ángel
La Fiscalía General de la República y la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sumaron un nuevo revés en el caso de Rosario Robles por la llamada “Estafa Maestra”.
Los tres magistrados de un tribunal federal desecharon los recursos que dichas instituciones promovieron en contra de la determinación que tomó un juez federal el cual había considerado que la exoneración que Robles recibió en el proceso que estaba abierto en su contra se ajustaba a un amparo que ganó previamente.
El tema se remonta al amparo que en enero de este año obtuvo la extitular de Sedesol y Sedatu y en el cual, el Noveno Tribunal Colegiado consideró que era necesario que los jueces responsables del caso analizaran si el delito de omisiones que se le imputaba no podrían seguirse a través de otra vía distinta a la penal.
Dicho criterio fue traslado al Juzgado Tercero de Distrito en Materia Ampao Penal de Ciudad de México para que este, a su vez, ordenara al juez responsable del caso revisar si era conveniente que el proceso penal continuara.
En febrero pasado, como es ya conocido, el juez de control Omar Paredes Gorostieta dictaminó que lo procedente, siguiendo las directrices de lo que se ordenó en el amparo, era cancelar el proceso en contra de Robles y exonerarla del delito de ejercicio indebido del servicio público. Ello con la finalidad de que las referidas omisiones se examinaran solo por la vía administrativa.
Dicha determinación fue devuelta al juez Tercero de distrito quien consideró que lo resuelto por Paredes se ajustaba a los lineamientos del amparo. Fue justo en contra de este análisis que la FGR y la ASF promovieron un recurso de inconformidad al considerar que los jueces se habían extralimitado al exonerar a la exfuncionaria federal. Dichas inconformidades quedaron asentadas con los registros 33/2023 y 34/2023.
Sin embargo y tras analizar el expediente, los tres magistrados consideraron que las resoluciones que tomaron los jueces de control y amparo si cumplieron con los alcances del amparo que Robles obtuvo, por lo que lo procedente era desecharlas de plano y dar por concluido el asunto.
Lo anterior significa que la FGR ya solo cuenta con un recurso vivo para tratar de rescatar este proceso. Se trata de una apelación que se encuentra bajo revisión de un tribunal de apelación, el cual está analizando si los argumentos con los cuales el juez Paredes Gorostieta determinó exonerar a la exsecretaria de Estado fueron correctos.
Se prevé que la determinación en cuanto a la referida apelación se anuncie este mismo mes de septiembre.
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