
Por Imelda Nathaly González Guevara
El día de hoy celebramos en México y desde hace 62 años el día del abogado, esto a raíz de la petición que hizo el fundador del Diario de México, el ingeniero Federico Bracamontes, al entonces Presidente de la República: Adolfo López Mateos.
Según los anales de la historia, en esta fecha, pero del año 1553 se estableció la primera Cátedra para la enseñanza de Leyes en la Real y Pontificia Universidad de México, la cual fue la primera institución de educación superior en el continente americano fundada el 25 de enero de dicho año?, misma que posteriormente y hasta la actualidad se ha mantenido como la Universidad Nacional Autónoma de México.
La abogacía durante mucho tiempo se ha considerado como una de las preparaciones profesionales de élite; antaño los abogados se reconocían por su manejo del latín, su vasto conocimiento de la cultura general, su estatus social y hasta su distinguido porte.
Los tiempos cambian y la evolución social nos ha llevado también a la modificación de ciertos patrones o estereotipos, lo que no cambia, ni debe cambiar, es la sólida preparación, profesionalización y actualización de los que ya son abogados y de quienes aspiran a serlo.
Uno de los tantos fines del derecho es el auxilio en la defensa de los derechos de quien lo solicita, así como el apoyo en la salvaguarda y/o reparación de bienes jurídicos tutelados que se encuentren lesionados, y ello no es cosa menor, pues alguien ha depositado su confianza en un letrado del derecho.
Los mandamientos del abogado escritos en 1949 por Eduardo J. Couture siguen tan vigentes hoy como hace setenta años, mismos que me permito transcribir para ustedes:
? Estudia: El derecho se transforma constantemente. Si no sigues sus pasos, serás cada día un poco menos abogado.
? Piensa: El derecho se aprende estudiando, pero se ejerce pensando.
? Trabaja: La abogacía es una ardua fatiga puesta al servicio de la justicia
? Lucha: Tu deber es luchar por el derecho; pero el día que encuentren en conflicto el derecho con la justicia, lucha por la justicia.
? Sé leal: Leal para con su cliente, al que no debes abandonar hasta que comprendas que es indigno de ti. Leal para con el adversario, aun cuando él sea desleal contigo. Leal para con el juez, que ignora los hechos y debe confiar en lo que tú le dices; y que, en cuanto al derecho, alguna que otra vez, debe confiar en el que tú le invocas.
? Tolera: Tolera la verdad ajena en la misma medida en que quieres que sea tolerada la tuya.
? Ten paciencia: El tiempo se venga de las cosas que se hacen sin su colaboración.
? Ten fe: Ten fe en el derecho, como el mejor instrumento para la convivencia humana; en la justicia, como destino normal del derecho; en la paz como sustitutivo bondadoso de la justicia; y sobre todo, ten fe en la libertad, sin la cual no hay derecho, ni justicia, ni paz.
- Olvida: La abogacía es una lucha de pasiones. Si en cada batalla fueras cargando tu alma de rencor, llegará un día en que la vida será imposible para ti. Concluido el combate, olvida tan pronto tu victoria como tu derrota.
? Ama tu profesión: Trata de considerar la abogacía de tal manera que el día en que tu hijo te pida consejo sobre su destino, consideres un honor para ti proponerle que se haga abogado.
Como podemos observar, ser un verdadero abogado no es sólo cumplir una currícula, obtener un título y una cédula profesional, es más bien una preparación permanente a lo largo de la vida y que debe además hacer uso de valores como la ética, como eje rector del desempeño y comportamiento profesional.
Ya mencionaba líneas arriba sobre el paso del tiempo, pues bien, nos ha tocado ser parte de la evolución e influencia de la tecnología en el intercambio de conocimiento a través de las redes sociales y las diversas plataformas digitales, no debemos sino aprovecharlas al máximo, pues es maravilloso poder escuchar conferencias, cátedras y discursos de los más distinguidos juristas que se encuentran alrededor del mundo y que con tal sólo un click estén a nuestro alcance; de igual manera, aprovechar los libros digitalizados o los videos en relación a la práctica procesal.
El día de hoy, reconozco como siempre? y agradezco a todos nuestros grandes profesores, quienes con pasión, profundo conocimiento y sentido de la solidaridad nos transmiten sus doctos conocimientos y particulares experiencias para una mejor formación.
A los alumnos de todas las escuelas de derecho, les sugiero que nunca olviden su propósito inicial, la decisión que los hizo optar por esta profesión; que no claudiquen a pesar de tantas circunstancias que pudieran parecer adversas, al final la recompensa y la satisfacción serán altas.
Feliz día a todos los que de una u otra forma desarrollan nuestra profesión, tanto en el ámbito público como en el privado.
Como cada ocasión, agradezco a quienes se toman unos minutos de su tiempo para leerme. ¡Hasta la próxima!
Mtra. Imelda Nathaly González Guevara
Profesora de la Facultad de Derecho