El delito es un problema que afecta a todas las sociedades, y que genera consecuencias negativas tanto para las víctimas como para los agresores, así como para el conjunto de la comunidad. Por ello, es necesario buscar estrategias que permitan prevenir y combatir el delito de manera eficaz y humana, respetando los derechos y las garantías de todos los involucrados.
En este sentido, la criminología puede jugar un papel fundamental, ya que se trata de una ciencia que se ocupa de estudiar el delito, el delincuente y la delincuencia, así como sus causas, manifestaciones y consecuencias. La criminología se apoya en diversas disciplinas, como la sociología, la psicología, la biología, el derecho, la estadística, la medicina, la ingeniería, entre otras, para analizar el fenómeno criminal desde una perspectiva integral y multidimensional.
La criminología puede contribuir a la prevención del delito de varias maneras, por ejemplo:
- Identificando los factores de riesgo y de protección que influyen en el comportamiento delictivo, tanto a nivel individual como social, y proponiendo medidas para fortalecer los segundos y reducir los primeros.
- Diseñando y evaluando programas de prevención primaria, secundaria y terciaria, dirigidos a distintos grupos de población, como niños, jóvenes, adultos, familias, comunidades, etc., con el fin de prevenir la aparición, la repetición o la agravación de conductas delictivas.
- Asesorando y colaborando con las autoridades y los organismos encargados de la seguridad pública, la administración de justicia y el tratamiento penitenciario, para mejorar la eficiencia, la calidad y la transparencia de sus acciones, y para garantizar el respeto a los derechos humanos y el estado de derecho.
- Generando y difundiendo conocimiento científico sobre el delito, el delincuente y la delincuencia, a través de la investigación, la docencia y la divulgación, con el fin de sensibilizar, informar y educar a la sociedad sobre esta problemática, y de fomentar una cultura de la legalidad, la paz y la convivencia.
La criminología, por lo tanto, es una ciencia que puede aportar mucho a la prevención del delito, siempre y cuando se le reconozca el valor trascendental que posee, se le otorgue un espacio y se le brinde suficiente apoyo. La prevención del delito es una tarea que nos compete a todas y todos, y que requiere de la participación activa y coordinada de los diferentes actores sociales, entre los que se encuentra el criminólogo, un profesional comprometido con el bienestar y la seguridad de la sociedad.