“El arte es lo que dejas salir”.
Andy Warhol
Todos tenemos algo que expresar, lo interesante está en la forma de hacerlo. El motivo puede variar y ser muchos al mismo tiempo, desde trabajo, entretenimiento, creatividad, inquietud, terapia hasta redención.
Partiendo desde el punto en que el arte se puede definir como la actividad en la que el hombre recrea, con una finalidad estética, un aspecto de la realidad o un sentimiento en formas bellas, imagino lo interesante que tienen que expresar aquellas personas que por una u otra situación están en condiciones de encierro, por alguna circunstancia desafortunada que los llevó a prisión.
Y no sólo eso, más allá de la expresión artística, el arte, representa mucho más.
En su forma de trabajo que ayuda a remunerar las actividades de aquellos que enfocan su tiempo en ello, es un trabajo que al mismo tiempo disfrutan.
Entretenimiento y cultura pues al acceder al conocimiento de las diferentes corrientes y a la sabiduría que da conocer la historia del arte, no es cosa poco grata sino infinitamente placentera.
Creatividad e inquietud, como situaciones que ocupan a aquellas mentes de no desviarse de un camino que necesariamente los llevará a una visión diferente que la que los llevó a la prisión y que en un punto de inflexión los direccionará por el camino de la reinserción.
Terapia porque al trabajar en esta ocasión con grupos considerados vulnerables, ayuda a sus tratamientos y es un gran auxiliar en aquellos métodos que ayudan a sacar a esas personas de una falsa realidad.
Una redención porque al final todas aquellas personas privadas de su libertad que se encuentran en prisión hallan una forma para transformar sus aspiraciones en el trabajo, la educación y el deporte, con lo que buscan ganarse un perdón que les permita obtener una nueva oportunidad, una nueva vida.
Como institución, a nosotros, nos conmueve y nos obliga a reconocer todos estos esfuerzos de actores de la sociedad civil, muchas organizaciones e instituciones que contribuyen para que cumplamos con los preceptos que marca nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 18: “El sistema penitenciario se organizará sobre la base del respeto a los derechos humanos, del trabajo, la capacitación para el mismo, la educación, la salud y el deporte como medios para lograr la reinserción del sentenciado a la sociedad y procurar que no vuelva a delinquir, observando los beneficios que para él prevé la ley”.
Es en este contexto que me permito expresarles nuestro eterno agradecimiento, porque un alma enamorada del arte tiene altas posibilidades de actuar positivamente.
Antonio Hazael Ruíz Ortega
Licenciado en Derecho con Maestría en planeación y gestión educativa; Maestría en prevención del delito y sistemas penitenciarios; Especialista en prevención del delito y derechos humanos y Ex subsecretario de Sistemas Penitenciarios y menores infractores de la CDMX.
Twitter: @Hazaelruizo
